La fisioterapia respiratoria es una especialidad dentro de la fisioterapia que se encarga de la prevención y tratamiento de las alteraciones de la respiración. El objetivo de dicha fisioterapia, en términos generales consta de:

  • Aumenta la ventilación pulmonar
  • Mejorar el intercambio de gases
  • Beneficia el rendimiento de la musculatura respiratoria
  • Disminuir la disnea
  • Disminución del moco

Dicha fisioterapia es mucho más útil de lo que se cree, ya que se encarga de mejorar patologías crónicas muy complicadas en algunos casos. La mejor manera de explicar dicha fisioterapia es poniendo claros ejemplos de tratamiento.

Técnicas de secreción en fisioterapia respiratoria

Dicha técnica, consta de tratamiento por vibración en la caja torácica, sobre todo en niños y adultos, y en enfermedades pulmonares obstructivas. Su objetivo es hacer que el paciente secrete la mayor parte de moco posible para facilitar la respiración.

Técnicas para mejorar el intercambio de gases

Esta parte se dirige a base de ejercicios y consejos, los cuales ayudan a que el oxígeno entre mejor en el torrente sanguíneo.

Además de esto, dichos ejercicios alivian dolores de cuello, ya que la mayoría de los músculos accesorios de la respiración se encuentra en el segmento del cuello.

Técnicas de reducción de la fatiga en la musculatura respiratoria

Estas técnicas permitirán a los músculos respiratorios descansar y optimizar la sesión. Estas técnicas se basan en ayuda inspiratoria con respiradores de presión positiva intermitente, cuyo objetivo es suministrar una presión inspiratoria en el momento en el que el paciente ha generado un esfuerzo inspiratorio.

Como podemos ver, hay muchas formas de trabajar esta subespecialidad tan desconocida dentro del sector de la fisioterapia, incluso teniendo la importancia que presenta en patologías crónicas asociadas, lo cual es el principal problema, ya que rara vez van por separado, sino que empeoran todo tipo de pronóstico.

Vamos a exponer varios ejemplos rápidos y fáciles de ejercicios tipo en dicha especialidad:

  1. Respiración con labios fruncidos:

Con este ejercicio dificultamos la salida del aire, obligando a los pulmones a ejercer una fuerza mayor, entrenando su fuerza de espiración. Pasos a seguir:

  • Inspirar lentamente por la nariz
  • Aguantar el aire 2-3 segundos
  • Soplar lentamente frunciendo los labios
  • Respiración abdominal o diafragmática:

Con este ejercicio mejoramos la calidad inspiratoria del paciente y el tiempo que aguanta sin respirar. Pasos a seguir:

  • Paciente tumbado boca arriba con piernas flexionadas.
  • Colocar manos en el abdomen para notar cómo la barriga se infla y desinfla.
  • Tomar aire en cantidad máxima que se pueda por la nariz y expulsar por la boca lentamente con los labios fruncidos (ejercicio 1)
  • 2-3 veces al día, unas 15 repeticiones cada vez.
  • Ejercicios de espiración lenta con la boca abierta:

Este ejercicio ayuda a mover secreciones hasta la zona más cercana de la boca que después expulsaremos con una tos. Pasos a seguir:

  • Tumbado de lado en una superficie plana o sentado en una silla.
  • Inspirar por la nariz de manera normal.
  • Espirar con la boca abierta de manera lenta y hasta vaciar del todo los pulmones. Realizar durante 5 minutos y repetir tumbado sobre el otro lado.
  • 2 veces al día (mañana y tarde).

En resumen la fisioterapia respiratoria ayuda a la prevención y tratamiento de las alteraciones de la respiración, mejora la capacidad pulmonar, su ventilación y el rendimiento de la musculatura implicada en el proceso respiratorio, disminuye la disnea y el moco, en definitiva la fisioterapia respiratoria ayuda a mejorar la calidad de vida.

 

francisco ruiz fisioterapeuta

Un artículo de Fran Ruiz
Fisioterapeuta de Vital&Clinic

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