Antes sepamos a qué nos referimos cuando hablamos de Gota y es que la afectación comúnmente llamada “GOTA” se refiere a un tipo concreto de artritis.
¿Cómo saber si padeces de gota?
Sus características fundamentales son como en cualquier caso de artritis, inflamación, hinchazón, aumento de sensibilidad dolorosa, y en ocasiones, aumento de la temperatura local de una o varias articulaciones. La aparición de esta respuesta articular no tiene por qué tener un origen mecánico o traumático.
Concretamente en el caso de la “gota”, esta reacción se produce por la presencia de altos niveles de ácido úrico en la sangre en forma de cristales microscópicos que se depositan en la articulación afecta, originando la respuesta inflamatoria.
¿Qué es el ácido úrico?
El ácido úrico es un producto de desecho que se produce cuando el cuerpo descompone las purinas. Las purinas se encuentran en muchos alimentos, incluidas las carnes rojas, las vísceras y los mariscos.
La gota era conocida como la enfermedad de los reyes y es que en la antigüedad eran los nobles los que tenían pleno acceso a comer cantidades ingentes de carne roja y marisco.
En ocasiones, estos cristales pueden formar acúmulos de mayor tamaño que podrían llegar a depositarse incluso en los riñones, provocando cólicos nefríticos.
La gota es más común en hombres que en mujeres y generalmente ocurre después de los 40 años. Existen muchos tratamientos diferentes para la gota, pero el más efectivo es prevenir que ocurra en primer lugar.
¿Cómo podemos tratar la gota desde la fisioterapia?
Un paciente puede sufrir un episodio agudo de gota en una o varias articulaciones al mismo tiempo, siendo más frecuentes en el primer dedo de los pies. Puede durar entre 2 días y hasta 2 semanas. Se considera una enfermedad crónica cuando estos episodios empiezan a repetirse con frecuencia o periódicamente.
Los episodios agudos de gota se tratan en fisioterapia con medidas físicas antiinflamatorias y pueden combinarse con tratamientos médicos como la toma de: antiinflamatorios no esteroideos, colchicina oral o corticoesteroides.
La mejor opción preventiva es realizarse una prueba diagnóstica adecuada como puede ser un análisis de sangre, llevar alimentación e hidratación adecuadas, actividad física saludable, y tratamientos médicos bloqueantes de la producción de ácido úrico o facilitadores de su eliminación si fuese necesario.
¿Cómo podemos prevenir su aparición?
La mejor manera de prevenir la gota es evitar los alimentos ricos en purinas. También debe beber muchos líquidos, especialmente agua, para ayudar a eliminar el ácido úrico de su cuerpo. Si ya tiene gota, existen muchos medicamentos diferentes que pueden ayudar a aliviar el dolor y la inflamación.
Rubén Díaz
Fisioterapeuta